Dirección:
Jean-Pierre Améris; Intérpretes:
Benoît Poelvoorde, Isabelle Carré, Lorella Cravotta, Lise Lamétrie, Swann Arlaud, Pierre Niney, Stéphan Wojtowicz; Guión:
Jean-Pierre Améris, Philippe Blasband; Música: Pierre Adenot; Fotografía: Gérard Simon
Angélique es una mujer joven que tiene un problema patológico de
timidez y acude regularmente a una terapia de grupo de Tímidos Anónimos.
Encontrará trabajo en una empresa chocolatera, donde el jefe,
Jean-René, parece ser bastante arisco y comportarse secamente. En
realidad, tiene el mismo problema que Angélique con respecto al trato
con la gente, e incluso más acentuado. Sin embargo, ambos se sentirán
atraídos el uno por el otro. Angélique comenzará a trabajar de
comercial, aunque en realidad ella es una experta creadora de
chocolate, que sabe el secreto para fabricar el mejor chocolate del
mundo.
Amable y divertida comedia francesa que se ve como un cuento o
fábula sobre la búsqueda de la felicidad por parte de personas de gran
corazón que se sienten hiper vulnerables e inseguros ante el futuro. El
aire de la comedia es ingenuo y tierno, plagado de momentos cómicos,
más o menos logrados, pero siempre agradables, ofrecidos en la mayoría
de las ocasiones por las ocurrencias del actor belga Benoît Poelvoorde (Nada que declarar), que está empezando a convertirse en un pazguato cómico que aquí recuerda a una especie de Woody Allen de habla francesa, también por esas surrealistas terapias con el psicólogo.